La terapia familiar

La terapia familiar nos enseñará a mejorar la manera en que nos comunicamos y a ocuparnos efectivamente de los problemas que afectan la convivencia en el hogar. Generalmente, un terapeuta familiar será el encargado de darnos las herramientas necesarias para encontrar la raíz del conflicto y encontrar los medios para enfrentarlo. Este tipo de terapia puede ser una solución a corto o largo plazo y está dirigida a todos los que tienen el compromiso de participar. En Terapéate Ya, te explicamos por qué debes recurrir a esta y los beneficios que puede aportar a tu familia. 

¿Por qué utilizar la terapia familiar?

La terapia familiar es una manera de encontrar apoyo para resolver todas las situaciones que nos afectan en la vida familiar, relación de pareja, hijos o cualquier otro ámbito. Nos servirá para atender problemas matrimoniales o económicos, así como para fortalecer la relación entre los hijos y padres, efectos secundarios del uso de sustancias o patologías psicológicas.

Constituye una ayuda para toda la familia y combinado con otros tipos de tratamientos para trastornos, en el caso de tener algún integrante que lo padezca es muy efectiva.

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Cuando ir a terapia familiar

Esta terapia ayuda a cada uno de los miembros de nuestra familia a sobrellevar un problema si algún integrante tiene una enfermedad mental. Sin embargo, tenemos que estar conscientes de que la persona que padezca dicha patología deberá continuar con las sesiones de tratamiento y medicación de manera individualizada.  De modo, que nos enseña a cómo convivir con un familiar que tiene estas dificultades con las herramientas adecuadas.

Asimismo, si identificamos que algún un familiar tiene adicciones, podemos asistir a terapia familiar. Mientras que, dicho individuo que atraviesa el problema en sí, recibe un tratamiento individual que lo ayude a superar dicha dependencia a una sustancia. Toda nuestra familia puede participar en este tipo de ayuda, especialmente si queremos obtener los recursos necesarios para enfrentar la adicción cuando la persona no ha buscado ayuda propia.

Si buscamos comprender bien qué es la terapia familiar, debemos estar conscientes de que existen varios tipos y todas son un medio de asistencia para resolver conflictos familiares y de pareja. Si no nos sentimos escuchados por el otro, la comunicación o la falta de expresión siempre están presentes o la convivencia con los niños ha alterado el ciclo sexual, podemos solicitar una intervención psicológica. Ya que, encontraremos las herramientas necesarias para detectar cuáles son los problemas que afectan dicho vínculo amoroso y aprender a sobrellevar situaciones futuras que aparezcan.

Dependiendo de la gravedad del problema que nos aborde, tomar terapia puede ser una solución corta o a largo plazo. Por lo tanto, tenemos que ser conscientes de que esta asistencia solamente sirve cuando estamos dispuestos a recibir la ayuda por el tiempo necesario que considere el terapeuta. Además, sirve para cada uno de los integrantes que esté comprometido a recibir las herramientas necesarias para solucionar los problemas que afectan nuestra convivencia. Te recomendamos esta terapia para encontrar una respuesta ante los conflictos que afectan tu relación familiar o de pareja y encontrar el bienestar emocional individual.

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